lunes, 28 de octubre de 2013

Las puertas de la percepción.

En 1954, Aldous Huxley, escribe su ensayo llamado Las puertas de la percepción, cuyo título está basado en una cita de un poema de William Blake que dice :" Si las puertas de la percepción fueran abiertas, todo le parecería al hombre como realmente es, infinito".

                                             Aldous Huxley.

En dicho ensayo, Huxley describe sus experiencia alucinógenas después de consumir mescalina.
El grupo de rock The Doors se basaron en este ensayo para darse nombre y para su canción "Break on through".


                                    Imagen fractal, muy similar a lo experimentado por Huxley.

Basándose en estas experiencia, Huxley llega a la conclusión de que el cerebro humano filtra la realidad para no dejar pasar todas las impresiones e imágenes (es bien conocido que el ojo humano sólo es capaz de enviar al cerebro una mínima parte de lo que observa) y que éste sería totalmente incapaz de procesarlas.

En sus experimentos con la mescalina observa que los objetos pierden su funcionalidad, el espacio y el tiempo se vuelven irrelevantes (lo que apoya la teoría de que en realidad no existen),aumenta la percepción, la cual se vuelve sobrecogedora e inquietante, ya que el individuo se ve incapaz de hacer frente a tantas impresiones.

Es bien conocido que el descubrimiento más importante de la historia, el ADN, lo lograron Crick y Watson gracias a experimentos con ácido lisérgico (LSD).
Cabría preguntarnos en este punto:¿la realidad es lo que vemos cotidianamente o más bien es lo que vislumbramos cuando entramos en estados alterados de conciencia?.

Históricamente, tribus de todas las partes del mundo han utilizado peyote, ayahuasca y muchos otros alucinógenos para entrar en contacto con otras realidades y entidades sobrenaturales.

                                             Imagen fractal, muy similar a las experimentadas con Ayahusca.

Referente a esto, Albert Einstein dijo:"La realidad es simplemente una ilusión, pero una ilusión persistente". Lapidario, queda claro que él opinaba que la realidad es sólo un escenario montado a nuestros ojos que sólo en ocasiones llegamos a rasgar y a vislumbrar lo que hay detrás.
En conclusión, no vemos el mundo como realmente es, sino como nosotros somos.

Pensad por un momento que en lugar de ojos, tuviérais dos microscopios que enviaran imágenes al cerebro. La realidad sería muy distinta a la que conocemos, pero también sería errónea ya que cualquier instrumento que usemos para ver la realidad, nos va a engañar.

Podrían, entonces los fenómenos paranormales ser simplemente errores de programación de nuestro sistema cerebral durante los cuales vislumbramos una realidad con la que no estamos acostumbrados a lidiar? que interesante pregunta.


Por Swan Dive.

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